Los proyectos de alumbrado público inteligente lograrían el ahorro de hasta 80% de la energía que se gasta en los sistemas convencionales Se espera que en el año 2023 se inviertan más de 190 mil millones de dólares (mmdd) en el desarrollo de iniciativas relacionadas al IoT a nivel mundial

La iluminación inteligente contribuye a mejorar el funcionamiento de las ciudades y brindar importantes ahorros de energía en las ciudades donde se han implementado estos proyectos, además de incrementar la percepción de seguridad de los ciudadanos.

Con la combinación de luz led y sistemas de control y automatización, las grandes metrópolis han logrado tener una red mucho más solvente y, al mismo tiempo, contar con la capacidad de administrar mejor sus recursos eléctricos. A partir de la captura de los datos de información, también son capaces de desarrollar nuevas soluciones a problemas que no estén observando, identificar fallos de la red y obtener un análisis detallado sobre los mismos.

Por las posibilidades que ahora ofrece, la iluminación ha jugado un papel fundamental en el proceso de transformación digital de los países, y particularmente en el aspecto energético. Un informe de la consultora Gartner advierte que el impulso de proyectos de alumbrado público inteligente lograría que, en su totalidad, se ahorre hasta 80% de la energía que se gastaría en los sistemas convencionales[1].

Además de adaptar nuevas tecnologías de iluminación, las grandes urbes han entrado en una carrera constante a fin de involucrar diferentes innovaciones con el objetivo de ofrecer mejores servicios a los ciudadanos. Por ejemplo, con la adopción del Internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés), tendencia que tiene como finalidad principal conectar instalaciones físicas con el Internet, desde objetos sencillos hasta sitios ligados a cosas como la movilidad o los propios edificios.

De acuerdo con una evaluación hecha por Statista, se espera que en el año 2023 se inviertan más de 190 mil millones de dólares (mmdd) en el desarrollo de iniciativas relacionadas al IoT[2].

“El proceso de transformar digitalmente las ciudades condujo a la aparición de las Ciudades Inteligentes (smart cities), término con el que se le conoce a todas aquellas urbes que han ido introduciendo, en distintos grados, tecnología en sus diversos sistemas, y con el plan de volverlas cada vez más eficientes en las prestaciones que ofrecen y el manejo de los recursos con los que trabajan”, afirmó Sergio Villalón, CEO de Signify para América Latina.

Entre las ciudades que mayores avances han logrado se encuentran Nueva York y San Francisco, en Estados Unidos, además de Shenzhen y Beijing, en China, o Seúl, en Corea del Sur[3].

Mientras tanto, en América Latina existen proyectos importantes como los desarrollados en Buenos Aires, Argentina y Canelones en Uruguay. Además, de otros tantos en desarrollo como en Río de Janeiro, Brasil, varias ciudades en México y Chile, entre otros.

“Aún es mucho lo que se debe de avanzar en el mundo en este sentido; sin embargo, los pasos se están dando, y la tecnología, sin duda, seguirá caminando hasta alcanzar la evolución de cada una de nuestras ciudades. En Signify entendemos perfectamente la importancia que tiene todo este proceso, por lo que continuaremos trabajando de manera continua en el desarrollo de soluciones que permitan a las metrópolis dar este salto lo antes posible”, concluyó Villalón.