Por Mike Morrison, Vicepresidente Senior y Gerente General Senior de cloud, infraestructura y seguridad de Unisys
El momento que hemos vivido ha obligado a acelerar el ritmo de los cambios en las compañías, pero moverse rápido puede ser incómodo. Te pedirán que hagas recomendaciones sobre situaciones con las que raras veces te has encontrado, que le des poder a diferentes tipos de equipos y que evalúes el valor del negocio en un entorno para el que el conjunto de métricas existente no es completo. Esto significa que tendrás que ser visionario, ampliar tus procesos de pensamiento, buscar diversas perspectivas y convencer a los demás sobre lo que será valioso para tu organización.
Si vas despacio, puede ser que hagas las cosas bien, pero también llegarás unos dos años tarde. Como dijo Mark Twain, "la mejora incremental es mejor que la perfección retardada".
Por eso la agilidad y la velocidad – que permite la tecnología en la nube – están a la orden del día. He apuntado aquí algunas formas de moverse con rapidez y ofrecer novedades a tus clientes y a tu empresa.
Amplía tu forma de pensar sobre el retorno de inversión y el riesgo
Mucha gente se ha subido al carro de la transformación digital, pero no todo el mundo entiende sus implicaciones. Los empresarios pueden saber que el equipo se beneficiará, pero puede ser que no entiendan cómo o por qué lo hará. Como resultado, pueden estar dispuestos a hacer apenas algunas cosas de manera diferente. Esto puede deberse a que el análisis clásico del retorno de la inversión (ROI) no se aplica bien a la transformación digital y, sobre todo, a los entornos en la nube. El modelo clásico pasa por alto el menor riesgo, la agilidad y la velocidad que ofrece la nube.
Debes entender que la nube te permite modelar un proyecto con rapidez, por lo que no necesitas pasar semanas averiguando una arquitectura, tratando de determinar la computación o el almacenamiento exactos que debes adquirir, o qué acuerdo de licencia debes contratar. Ten en cuenta que una plataforma de computación en la nube puede permitirte ajustar las decisiones a los movimientos de la empresa. Deja de gastar en exceso en infraestructura; en su lugar, utiliza la nube para ampliar y reducir la escala según sea necesario. Dedica tiempo al valor comercial de la iniciativa.
Encuentra a un líder en la empresa que defienda tus esfuerzos en la nube y te ayude a contar la historia
Identifica y conecta con alguien dentro de la empresa que pueda defender tu transformación digital basada en la nube. Selecciona a quien pueda entender el valor para el negocio de una transformación digital y que se convierta en un aliado para desarrollar la propuesta de valor y contar la historia.
Trabaja con esta persona para educar a los demás sobre el valor comercial que aportará la transformación. Involucrar el lado comercial te ayudará a demostrar que no estás adoptando la tecnología por la tecnología, porque es lo mejor que hay en el mercado.
Modernizamos una aplicación que funcionaba en una plataforma obsoleta para uno de nuestros clientes. Los cambios eran difíciles y no tenía muchos empleados para brindarle soporte al proyecto internamente. Con la aplicación optimizada, la empresa puede ahora asegurar más negocios. La ejecución en la nube se traduce en una incorporación más rápida de los asociados, porque la empresa no tiene que instalar la aplicación en los computadores de los nuevos empleados. Los empleados, por su parte, no tienen que esperar una semana para empezar a hacer su trabajo. En esencia, el beneficio para la empresa fue obtener más ingresos, más productividad, acelerar los cambios para ajustarse al mercado y tener un gasto de capital mínimo para mejorar la capacidad de cómputo y almacenamiento.
Considera la posibilidad de trabajar con un socio que te ayude a comunicar el valor de la nube a la junta directiva y a los líderes empresariales. Un socio con experiencia en la nube hará hincapié en la calidad por encima de la cantidad y podrá compartir estudios de casos que ilustren cómo otros han obtenido beneficios empresariales de la nube.
Entienda que no hay una fórmula para hacer las cosas en este entorno. Algunos proveedores de soluciones en la nube hacen las mismas cosas una y otra vez y querrán reproducirlas contigo. Evita este tipo de empresas y elige un socio que se adapte a tus necesidades únicas y pueda ayudarte a mercadear el valor empresarial de tu transformación.
Apóyate en equipos más pequeños y ágiles
Recurre a equipos más pequeños y pídeles que se centren en pequeñas tareas. Asegúrate de que estos equipos cubran diferentes funciones dentro de tu empresa. De este modo, los silos departamentales no te frenarán. En lugar de microgestionar estos equipos, confía en ellos y permíteles hacer su trabajo.
Un gran minorista es un ejemplo de este nuevo modelo en funcionamiento. Sus equipos de producto interfuncionales incluyen un director de producto, que no suele ser de TI; desarrolladores o ingenieros de TI; y un diseñador de experiencia de usuario. La dirección no les dice cómo resolver un problema, solo les dice cuál es el problema y los indicadores clave de rendimiento con los que tienen que trabajar.
El equipo decide la estructura, que puede cambiar en función del reto que se plantee. Los miembros del equipo se reúnen por la mañana y deciden quién hará qué y cuándo. Ya están listos para empezar. Es rápido y sencillo. Y lo más importante, el equipo es responsable de los resultados.
Céntrate en el impulso en lugar de hacerlo en la disrupción
Hoy se habla mucho de que las organizaciones deben "aceptar que el cambio disruptivo es la norma". En lugar de centrarse en la disrupción es mejor concentrarse en cómo hacer que el cambio y la innovación sean inherentes al funcionamiento de su organización y de los equipos que la componen.
Mi empresa está implantando un nuevo sistema de planificación de recursos empresariales (ERP). La gente puede pensar que, una vez que el sistema esté implantado, podremos tomarnos un respiro. Pero en cuanto empecemos a utilizar el nuevo sistema, vamos a contar a nuestros asociados todas las cosas que queremos hacer con él. Una vez que se implanta una nueva solución, no hay que detenerse: hay que pensar en lo que viene después, pero hay que hacerlo en el contexto de un cambio incremental, no de una perfección retardada.
La innovación y las mejoras continuas, los equipos ágiles, los campeones de la nube, una perspectiva amplia sobre el retorno de la inversión y el riesgo, y los socios de calidad te harán más receptivo, vanguardista y rápido. En lugar de patinar con el disco, podrá patinar hacia donde el disco va a estar. Puede ser un trayecto incómodo a veces, pero es hacia donde tu negocio debe dirigirse.