• InterNexa invirtió en una nueva generación de transpondedores de 1.2 Tb/s de Padtec, que garantiza una transmisión de datos de 300 Gb/s entre Río de Janeiro y Sao Paulo.
• Desde Londres y Amsterdam la empresa colombiana de telecomunicaciones y tecnologías de la información podrá interconectar a clientes de Colombia, Brasil, Perú, Argentina y Chile y sus más de 220 centros de datos.

Bogotá, noviembre de 2020 – El mundo digital en el que vivimos actualmente tiene una creciente demanda en el mercado de ancho de banda y velocidad, es por eso que se requiere intensificar la inversión en infraestructura de alta capacidad. Ese es uno de los objetivos de InterNexa, empresa de telecomunicaciones y tecnologías de la información, que opera una extensa red de fibra óptica en América Latina y que recientemente hizo una importante inversión para aumentar la capacidad de transmisión de sus redes DWDM (Dense Wavelength Division Multiplexing) entre los estados de Sao Paulo y Rio de Janeiro.

Para satisfacer la creciente demanda de altas tasas de transmisión entre dos de las regiones metropolitanas más importantes de Brasil, InterNexa utilizó sistemas Padtec para iluminar nuevos canales libres en su red óptica instalada (Alien Wavelength), con tasas de transmisión de 100 Gb/s. En total, los canales ópticos iluminadosrecorren más de 650 kilómetros, conectando los principales centros de datos y estaciones submarinas de Río de Janeiro y Sao Paulo.

“Al operar en un sector sensible a los desarrollos tecnológicos, InterNexa siempre está investigando y analizando las mejores tecnologías disponibles para elegir la que más se adapte a las demandas del mercado y represente la mejor relación costo-desempeño”, explica Carlos Gaviria, director general de InterNexa Brasil, quien agrega que “así, los clientes pueden dejar en nuestras manos sus necesidades de infraestructura y enfocar sus recursos en el aseguramiento de la calidad para el consumidor final”.

Uno de los aspectos más destacados del proyecto es la ruta de reserva iluminada en la red óptica de InterNexa, con una distancia total de 1.500 kilómetros de longitud, que conecta a Río de Janeiro y São Paulo a través de Belo Horizonte. El uso de esta nueva generación de transpondedores eliminó la necesidad de regenerar la señal a lo largo de la ruta, contribuyendo a la reducción de los costos de implementación y mantenimiento de las estaciones en la red óptica de larga distancia del operador.

En línea con las tendencias internacionales en tecnología DWDM para el segmento de centros de datos, la nueva línea de transpondedores integra alta velocidad de transmisión de datos con menor costo por bit transmitido. Una de las novedades tecnológicas de esta generación de transpondeores está en la mecánica de 300 mm de profundidad, que cumple con el estándar de los racks en entornos de datacenters y, también, de las estaciones de telecomunicaciones para aplicaciones en redes metropolitanas, backbones ópticos terrestres y sistemas submarinos de operadores y proveedores de servicio de internet.

Una interconexión entre Suramérica y 220 centros de datos

Adicionalmente a la inversión en Brasil, InterNexa se asoció con Epsilon, proveedora de servicios de conectividad global, para proveer en Suramérica un servicio de ‘peering’ remoto de alta calidad, que permite una interconexión de redes de Internet separadas de forma administrativa para intercambiar tráfico entre los usuarios de cada red por medio de la plataforma de conectividad de Epsilon,Infinity. De esta forma, este servicio ahora estará disponible para portadores y empresas de Colombia, Brasil, Perú, Argentina y Chile, quienes podrán obtener acceso ‘on demand’ a los intercambios de Internet (IX, por sus siglas en inglés) desde Londres y Ámsterdam.

Para explicarlo mejor, InterNexa utiliza el ‘peering’ remoto para acceder aLINX en Londres y aAMS-IX en Amsterdam desde Miami, a través de su red, permitiéndole así satisfacer las crecientes demandas de tráfico, además de fortalecer su alcance global con presencia en centros de conexión clave a través de Europa, y dándole la oportunidad a las empresas suramericanas de conectarse eficientemente a los mercados europeos.

“Suramérica tiene unos de los mercados más dinámicos y con mayor crecimiento en todo el mundo. Nuestro trabajo con InterNexa permitirá a más usuarios locales beneficiarse de una experiencia optimizada de redes de trabajo, al implementar sus aplicaciones y servicios”, afirmó Michel Robert, director ejecutivo de Epsilon. “Nuestra visión con Infiny está alineada con el enfoque de InterNexa de ayudar a los negocios suramericanos a tener una transformación digital. Con esta conectividad ‘on demand', se puede continuar escalando de manera eficiente para así brindarles sus servicios a más clientes en toda la región”.

Por medio de esta conexión a las redes de Epsilon, InterNexa puede interconectar a más de 220 centros de datos en 39 ciudades diferentes, con rampas de acceso a los principales proveedores de servicios en la nube, IX y otras redes a nivel mundial, con la posibilidad de dejar que Epsilon administre la conexión para obtener una mayor eficiencia, sobre todo teniendo en cuenta que el ‘peering’ remoto de Epsilon no solo es una solución rápida, sino también económica.

“Nuestra asociación con Epsilon está ayudándonos a manejar el creciente uso de ancho de banda de Internet en la región. Estamos viendo la inmensa demanda por parte de los videojuegos en línea y de otras aplicaciones, como el ‘streaming’ de videos. El ‘peering’ remoto nos permite conectar a nuestros clientes con puntos más cerca de donde estos servicios están alojados, para así lograr la mejor experiencia digital posible. Con un único contrato, contamos con acceso instantáneo a un completo ecosistema de puntos de intercambio de tráfico a través de todo el mundo y así podemos adaptar nuestra conectividad para satisfacer la demanda local”, dijo Jaime Giraldo, director de Nuevos Mercados de InterNexa.

De esta forma, queda claro que estas mejoras en la infraestructura y los sistemas de redes en Suramérica no solo mejoran las conexiones entre las empresas, sino que también traen un beneficio para la comunidad en general, quienes podrán tener acceso a velocidades de Internet más altas, acordes con las demandas de las nuevas tecnologías, de la transformación digital y de un futuro completamente interconectado, que permitan compartir información en cada vez menos tiempo.